Phokara está ubicada en una de las mesetas de las
Montañas Annapurna, la segunda en altura después del Monte Everest. El objetivo era subir a una montaña, pasar una noche y poder apreciar algunos de los picos del Himalaya desde un punto cercano. Hicimos trekking durante 2 horas conociendo la vida de los habitantes de la montaña, y al fin llegamos, muertos de cansancio, pero el paisaje era la recompensa. Al llegar a la cima el cielo estaba nublado, y no se apreciaba nada en el horizonte, pero después de un par de horas se abrio un poco el cielo y el Himalaya se nos presento delante nuestro.
Luego de la cena nos visitaron unos lugareños para cantarnos y bailar alrededor del fuego.
Al día siguiente al bajar la montaña pudimos ver más del Himalaya.
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