Camino al parque de Chitwan hicimos una parada a orillas del
río Trishuli para hacer rafting. Primero nos separamos en equipos de 8
personas, recibimos las instrucciones básicas para remar y que hacer en caso de
que el bote se tumbe, y luego al agua. Estuvo muy pero muy bueno, fue una
experiencia espectacular, 26 km de río con unos cuántos rápidos y con mucha
adrenalina.
En Chitwan nos quedamos en unos lodges, a la noche nos
visitaron unos lugareños que bailaron unas danzas típicas de la zona, y a la
mañana siguiente nos internamos en la jungla en elefantes. Sobre el final del
paseo hicimos el “baño de los elefantes”, que básicamente consistía en subirnos
a uno de ellos, meternos en el río y el elefante se recostaba hacia un lado
para dejarnos caer al agua. Estuvo muy divertido, principalmente cuando recogían
muchos litros de agua con la trompa y te la escupían en tu cara … A la tarde
hicimos un safari en canoas y caminamos por la jungla, la idea era ver
cocodrilos y algún personaje más de la selva, pero tan solo vimos ciervos y
monos. Al volver visitamos una aldea para conocer el estilo de vida de los
campesinos de la zona.
Baño de Elefante
Paseo en canoa y safari
Safari
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