De Dubái nos
fuimos al El Cairo, llegamos al aeropuerto y de ahí nos fuimos directo al hotel que estaba ubicado en una zona
tranquila de El Cairo. Ya en el bus nos advirtieron que tuviéramos cuidado con
alejarnos mucho del hotel pues el ambiente en Egipto todavía estaba "medio
complicado". Dado los problemas de este país el turismo ha disminuido muchísimo y en ocasiones los turistas son víctimas de engaños por egipcios que buscan aventajarse.
Al otro día temprano visitamos las Pirámides de Guiza, quienes fueron las tumbas de los Faraones de la
cuarta dinastía. Creo que es de los paseos que la gente más espera, pues son increíbles!
Todos los paseos en El Cairo los realizamos acompañados de un policía vestido de particular pero armado, decían que era para brindarnos una mayor seguridad.
Visitamos la Esfinge, la
monumental escultura con cuerpo de león y cabeza humana.
En la tarde fuimos hacia Memphis, quien fue la primera
capital de Egipto, para visitar el museo de Memphis, donde se encuentra la estatua de
Ramses II y a la esfinge de Alabastro.
Visitamos el Complejo funerario Rey Zoser (también conocido
por Necherjet - Dyeser, o Dyeser) y su pirámide
escalonada. En esta oportunidad pudimos entrar a la pirámide y ver las
paredes llenas de dibujos y jeroglíficos que ilustraban escenas de la época del
Rey Zoser. Luego fuimos a las
mastabas de Meri Rouka.
Ese día terminamos las visitas yendo a un Instituto de Papiro,
donde asistimos a una demostración de la fabricación de la hoja de Papiro.
Al otro día fuimos a La
ciudadela de Saladino que está situada en una pequeña montaña, Muzzattam. La
primer parte de la fortaleza y los muros fue construida por Saladino en 1176 y
luego fue ampliada y modificada. Fue el refugio de todos los gobernantes desde
Saladino en el siglo XII hasta Mehmet Alí en el XIX.
Visitamos la Mezquita
de Alabastro de Mohamed Alí, la más grande y esplendida de las cuatro mezquitas
ubicadas en la ciudadela de Saladino. Por supuesto como en todas las mezquitas
debimos cubrirnos los hombros y las rodillas, tanto las mujeres como los
hombres.
De ahí nos fuimos a la Mezquita del Sultan Hassan.
Y finalmente visitamos el Barrio Copto, donde se encuentran las
iglesias más antiguas de Egipto, construidas sobre los lugares donde descansó
la Sagrada Familia en su huida a Egipto. Allí también visitamos la Sinagoga más
antigua de Egipto construida sobre el lugar donde se dice que Moisés fue
encontrado.
De tarde visitamos el museo Egipcio, donde
encontramos las piezas más importantes del antiguo, medio y nuevo imperio. Es
increíble todo los que hay en ese museo, cuesta imaginar que esas cosas tienen
miles de años y están tan bien conservadas! Entre lo que más deslumbra son los
tesoros de Tutankhamon, un faraón que falleció a los 18 años. Su tumba fue
descubierta por un arqueólogo norteamericano (Howard
Carter), en 1922, que cuando cruzo el umbral que conducía al complejo funerario
del faraón se encontró con el espectáculo de un sepulcro prácticamente intacto
que encerraba un tesoro arqueológico de valor incalculable. También entramos a
una parte donde había momias, entre las que se encuentra la de Ramses III, muy
impactantes!!! Lamentablemente en este museo no se permitía sacar fotos! De ahí
nos fuimos al Bazar típico de Khan el Khalili, donde estuvimos un ratito porque
era de tardecita y el ambiente no era el mejor!